La Asociación está conformada por trabajadores del sector de la energía, unidos con la finalidad de aportar a su crecimiento profesional, laboral y espiritual. Su interés fundamental es el bienestar de sus afiliados velando por sus condiciones laborales, promoviendo de manera permanente el desarrollo de la competitividad y sostenibilidad de las empresas y el progreso social y económico de Colombia.
ATRAE trabaja con apego total a la ética como eje fundamental y permanente de su actividad y con observación de los principios del respeto, no discriminación, autocontrol, solidaridad, equidad y disciplina.
La ética es el valor fundamental de los directivos y afiliados. Definir nuestros pensamientos, decisiones y actuaciones de manera coherente, dentro de la más absoluta probidad, siempre en procura del bienestar colectivo, sin comprometer la buena fe y el respeto por las personas.
No discriminación: La Asociación no discrimina en razón de las diferencias y la diversidad de cualquier tipo. Incluso alienta ambas, entendiéndolas como base fundamental del progreso social y de la convivencia pacífica.
El respeto es un principio sustancial que permite que todos los afiliados sean considerados personas dignas y valiosas. Es, así mismo, la base del diálogo interno y con todos los demás grupos de interés.
El autocontrol implica la permanente reflexión para mantenerse dentro de las líneas básicas de ética y respeto. Como también el examen crítico permanente y corrección del rumbo en caso de algún extravío temporal.
La disciplina conlleva al trabajo consciente en aras de lograr el bienestar de los afiliados, la sostenibilidad empresarial y el desarrollo integral de Colombia.
La solidaridad es el compromiso con el respaldo mutuo y lograr el máximo bienestar colectivo posible.
La equidad implica nuestro interés en una relación más allá de la simple justicia entre trabajadores, empresas y la sociedad. Una relación basada en las necesidades y capacidades de cada quien.