Hoy compartimos algunas anotaciones sobre el trabajo independiente, el abuso de los contratistas y el desamparo de los trabajadores por prestación de servicios y compartimos el artículo del periódico El Tiempo: Lo difícil que es ser un trabajador independiente
- Se debería entender por trabajadores independientes a las personas naturales que prestan sus servicios en beneficio de otros, sin supuesta subordinación, por un precio determinado, que deben asumir todos los riesgos de su actividad.
- Muchos de los llamados trabajadores independientes son vinculados con entidades estatales, lo cual no evita que sean víctimas de la arbitrariedad de quienes los ocupan: pago de su servicio por fuera de los tiempos acordados, exigencias sobre el cumplimiento de horarios, diligencias eternas para lograr su vinculación y costos inauditos. El objetivo de los contratistas, aún de los estatales, es reducir los costos, sacrificando al trabajador e incumpliendo las disposiciones laborales y legales sobre la protección al trabajo y el cumplimiento de las condiciones que obligan a considerarlo como trabajador subordinado, con remuneración por sus servicios y con derecho a todas las prestaciones sociales de ley.
- Los trabajadores contratados por prestación de servicios, sólo en el papel son independientes.En la práctica terminan subordinados, obligados a cumplir horarios y permanecer disponibles, incluso los fines de semana.
- Al trabajador independiente no se le reconocen beneficios laborales tales como primas y vacaciones.
- Por salud, el trabajador independiente debe pagar el 12,5% y por pensión el 16%, ambos sobre el 40% de sus ingresos mensuales.
- La afiliación a riesgos laborales es voluntaria para el trabajador, pero el contratista debe pagar el monto que defina la A.R.L. 7. No existe vigilancia efectiva por parte de Mintrabajo para proteger a este importante grupo de trabajadores de los abusos a que los someten sus contratistas. Los trabajadores no denuncian por temor a perder el contrato que les proporciona algún recurso, por magro que les resulte, y a pesar de lo expoliador que les resulte la contratación y el trato indigno recibido.
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