Una pensión adecuada, la diferencia fundamental entre una vida digna, o preferir la muerte o la cárcel.
- Muchos de los mayores de 65 en Japón, ya pensionados, se ven obligados a recurrir a delitos con el fin de ser encarcelados y cubrir así gastos básicos de subsistencia.
- En Japón existe una tendencia al alza en los últimos años en la comisión de delitos menores, pero castigados con cárcel, con la intención de conseguir comida y techo gratis, que complementen la pobre pensión recibida.
- Las bajas pensiones no alcanzan ni siquiera para el alquiler, la comida y la atención médica, menos aún para cubrir calefacción y ropa.
- En Colombia la inmensa mayoría de las pocas pensiones que se otorgan equivalen a un salario mínimo legal mensual vigente o muy cercanas a este monto, con lo cual, los ancianos no logran cubrir sus necesidades básicas, y para colmo, muchos de ellos tienen a su cargo el sostenimiento de hijos o nietos desempleados.
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