- Está en condiciones de desfinanciamiento y falta de liquidez.
- Las deudas acumuladas que hoy suman cerca de $10 billones.
- Déficit presupuestario cercano a los $780 mil millones para el 2018 y en $3 billones para el 2019.
- Deudas por servicios no incluidos en el Plan de Beneficios en Salud (PBS), con una deuda a cargo de la Nación alrededor de los $2,5 billones.
- Deudas entre los Departamentos y las Instituciones Prestadoras de Salud (IPS), por los servicios del PBS en el régimen subsidiado, del orden de 1,2 a 1,8 billones.
- Deudas correspondientes a los contratos entre EPS y las IPS, que son para los aseguradores de $8 billones y para los IPS de $15 billones.
- La poca calidad en la prestación de los servicios. No sirve de mucho hablar de una amplia cobertura, sino está acompañada de una buena calidad en la prestación del servicio.
Las Soluciones Propuestas:
- Obligar a las Empresas Promotoras de Salud (EPS) a competir en términos de calidad de su gestión.
- Por lo tanto, se deben establecer indicadores objetivos para los servicios de las EPS: de generación de valor para los ciudadanos en la afiliación y contratación de la red, en la gestión del riesgo de sus afiliados, y en la eficiencia y calidad de la contratación.
- Que las EPS se adhieran libremente a un sistema de acreditación.
- Que los usuarios puedan elegir la EPS que más les convenga, según la calidad del servicio recibido.
- Mejorar y distribuir adecuadamente la gestión de las entidades de control.
- Superintendencia de Industria y Comercio: En cuanto a competencia y libertad de elección,
- Superintendencia de Salud: Exigencia de nuevos parámetros de habilitación financiera y técnica, incluyendo reservas técnicas y márgenes de solvencia.
- Superintendencia de Sociedades: Responsabilidad corporativa y arreglos societarios.
Fuente: Dinero. “En salud no todo es plata”. Noviembre 9 de 2018. Edición 554.
0 comentarios